Cuanto mas se acerca a ti
las vivencias le liberan
de las ondas del vivir
entre las falsas promesas.
Amaneceres de púrpura,
atardeceres de hiedra,
mentes que son como brújula
y en su actuar pretenden
ver a la roja amapola
teñida de color verde.
El navío de la vida
va cargado de mieses,
la razón y el sentimiento
aunque sufren los reveses
no entienden de sufrimientos
y sonríen al sol naciente;
mientras, aunque sea invierno,
los sentimientos florecen
en el jardín de los sueños
con una sonrisa inocente.
En ese jardín añorado
una alfombra se extiende,
unas manos la han hilado
con miel, sabor a muerte.
La luna acaricia una orilla
de arena, sabor a sal,
una ola, una marea,…
la barca sale a la mar
solo por volver a la arena
y sentir ese palpitar
del corazón sin cadenas
de los hombres en libertad.
La razón y sentimientos
ya se echan a navegar.
martes, 17 de noviembre de 2009
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