lunes, 30 de marzo de 2009

María ...

Suena el teléfono. Ella extiende sus delgados brazos, hace un gran esfuerzo, dirigiéndolos hacia la mesita de noche con la intención de contestar a esa otra persona que le está llamando, no puede sostener el auricular. No puede sostenerlo entre sus manos, casi no tiene fuerza, y se le escapa cayendo rodando por el suelo provocando un fuerte estruendo. Se ha silenciado, con ese golpe, el sonido insistente de la llamada. Ni siquiera se pregunta quien puede ser la otra persona. Olvidándose de recogerlo, volver a colocarlo en su sitio, se cobija entre las sábanas. La piel le quema y sin embargo siente un frío glacial que se pasea, milímetro a milímetro, por su columna vertebral. Otra vez la dichosa fiebre que no quiere remitir, esta vez sí que le está ganando el pulso que, siempre antes, en otras ocasiones había perdido en su luchar incesante.

Siempre hay una primera vez para todo. Siempre la hay. Existe una primera vez para vencer, para ser vencido, para soñar, para sufrir, para llorar, para reír, para reconocer errores…solo para vivir tenemos una oportunidad. El acoso, la absorción, solo es un sin sentido. Mi niño, los lazos familiares, pueden más que el querer vestir y desvestir a santos. Si ponen a prueba mi cariño hacia ti, por esos años vividos, día tras día, soy capaz de revelarme ante el mundo, de sacar fuerzas donde no las hay. Eso presentía soñar en su letargo a duermevela, sumida en un estado febril.

Pronto, en sus sueños, casi irreales, se vio con un fonendoscopio roto entre sus delgadas manos. María le reclama. En la habitación 305 alguien agoniza. Es una suite de hospital privado. Descuelga el teléfono y marca un número. Al otro lado del hilo, una voz le responde somnolienta: “Es madrugada, arréglatelas como puedas”.

Es amante del teatro. Cuando llega hasta la habitación con el fonendoscopio colgado del cuello, a sabiendas que no funciona, se lo coloca sobre sus oídos, y poniendo su base sobre el lado izquierdo del enfermo, se atreve a dictaminar: “termina de fallecer”. Eso no le parece honrado, no cree en la mentira ni en un mundo apoyado en la no nobleza, entonces alzando la voz de su alma, mirando a María, responde: “El fonendo está roto, la vida no es un teatro”.

Alguien, desde su dolor, le contestó: “no esperaba de ti mas que de tus labios saliera la verdad”. Salió de la 305 acongojada, con pasos lentos y cabizbajos, se dijo: “no merece la pena el hacer sufrir por causa de la mentira y las verdades hay que silenciarlas cuando pueden ser punto de mira de francotiradores”.

En sus sueños febriles, se repetía: “por favor, que a él no me lo toquen. Soy capaz de a desdentadas sacar fuerza de flaqueza, que a él no me lo toquen. Fue mi bandera, fue mi compañero, tuvo paciencia con mi alma díscola… que nadie me lo toque…es todo mi tesoro, es otro pétalo, raíz de mi alma soñadora y desinteresada. Es como la rosa de mi temprano rosal floreciendo…que nadie le toque”

Se despertó empapada en sudor. Tenía fría la frente y recogiendo el auricular del suelo marcó unos números en el teclado. Al otro lado, alguien le respondió dándole las gracias por su tesón y por el reconocer sus defectos. Ella no era divina, solo era humana. Podría haber soñado con otra cosa que le sucediera un día, pero no, esa fue su pesadilla, envuelta en manto de sudor febril danzó como, con cuerda danza, una bailarina de un todo a cien. Una flor al desperezar le hizo reaccionar. Sólo pensó, ella, al lanzar un bostezo: “ ¡cuánto os quiero a los dos!”.

Al acercarse a la ventana del recuerdo, vio un cuadro de rosas hermosas, dibujadas por unas manos firmes, eran sus manos gemelas. La pintura, reflejaba una dimensión extraña de lo abstracto. Uñas largas, dedos como delfines, cantautores de pinturas en lienzos y óleos…dedos viciosos de rima, dedos ágiles de deseos y de anhelos que desgarran partituras de unas notas de incontrolados sueños…

sábado, 28 de marzo de 2009

Eres bondad

Eres la bondad en su punto álgido,
derroche de luz en campos
sembrados de manzanilla,
como he extrañado tu voz
y el brillo de tus pupilas.

Cuánto he extrañado yo,
entre laberintos perdida,
esa calidez humana
que desprende tu sonrisa.

Hoy, en silencio,
como tantas veces,
hurgo entre los recovecos
de mentiras, de sandeces
y siento con el corazón dolido…
que a ti no quiero perderte.

Te veo entre las campiñas
donde crece el verde trigo
que viste con sus espigas
campos enteros de amarillo.

Una danza de jazmines
deslizará por el suelo,
no importa que no corra aire,
no importa que duerma el viento,
la luna queda muy alta
para tocarla en mis sueños
y la bondad de tu alma
ese tesoro…no quiero perderlo.

jueves, 26 de marzo de 2009

Duerme niño

Agua clara que no corre
por el lecho, río seco,
hace dormir a mi niño
sumido en profundo sueño.
Mamá es como la noche
de iluminada luna,
así es su cabello negro
mecido al aire, por viento,
y acaricia tu linda cara
con manos de terciopelo.
Duerme niño de luna
acurrucado entre besos
expresados con dulzura
desde un corazón tierno
Quizá mamá no soltó
de sus labios un te quiero
pero te hablan sus ojos
desprendiendo los destellos
de un corazón firme
capaz de rasgar silencios.
Duerme mi niño de luna,
por ti brillan los luceros.

miércoles, 25 de marzo de 2009

Para mí es la rima...

Para mí es la rima
agua, fresquita, de mayo,
es la fuente de vida
donde mi alma destapo.
Quien censura mi rimar
es persona, no muy cuerda,
me pasa como a la mar
no hay quien ponga cadenas,
pues siempre vienen a romper
las olas sobre la arena.
Por mucho que se intente,
por más que muevan intereses,
no dejaré de rimar
que antes de yo aprender
en otro lenguaje expresar
mis razones y sentimientos,
la rima fue mi cantar
y es el tesoro que tengo.
Rimando me acerqué un día
a la puerta de mis sueños,
me infecté de alevosía,
se activaron mis tormentos,
por eso a este rincón
con fidelidad me entrego,
rincón donde la libertad
abandera mis deseos.
Que la rima es mi pasión…
eso no es ningún secreto.

martes, 24 de marzo de 2009

La primavera

Los rayos de sol se desperezan antes
y se vuelven trasnochadores.
Ha nacido la primavera.
Comienzan a germinar los primeros brotes
de la adormecida esperanza,
prisionera en las redes de la injusticia.
Las voluntades, en barbecho invernal,
abren los ojos ante una balanza
que tiende a equilibrar los actos nunca juzgados.
Ha nacido la primavera.
Los sueños rotos, saliendo del letargo,
se recomponen al ritmo
del bello trinar de los pájaros.
Lo que queda de campo
se cubre de alegres y múltiples colores
como una alfombra de bello sentimiento
bajo la sombra de los sencillos almendros
con sus ramajes cubiertos de flores.
Ha llegado la primavera,
intensidad de alegre colorido al azar,
embriagada de refinados olores
que se desplazan entre la suave brisa
vigilada por un sol de cálido corazón.
El murmullo del correr del agua,
de esos primeros deshielos,
transita por la memoria nostálgica,
en su fluir forma hermosos riachuelos
de aguas cristalinas, frescas,
en un no campo ni huerto…
en un pasado no lejano
y ante un futuro incierto.
La primavera ha llegado
y el sol brilla sobre el cemento,
como si acariciara una flor
de hermosos pétalos.
La primavera ha llegado…
ya no es lo que era,
con el actuar humano
todo cambia, se transforma,
hasta de las estaciones el significado.
Pero…ya llegó la primavera.

martes, 17 de marzo de 2009

Tristeza

Triste anda la rima
entre laderas sombrías
porque tristeza acuna
al alma donde nacía.
Heridas tiene sangrando,
latigazos de mentiras,
maldita sea esa mano
que robó tanta alegría
solo por pasar el rato
y dar sentido a su vida.
Triste y melancólica anda,
huye de la hipocresía,
lleva desnuda el alma,
va deambulando perdida.
Entre las cumbres superfluas
se desgarró su autoestima,
se debilitó su fuerza
en el sangrar de la herida
y busca su fortaleza
hurgando entre su vida
y le grita la experiencia:
“¡nunca te des por vencida!
Castillos que se levantan
sobre base de mentiras,
por tener cimentación falsa
se desploman, son ruinas”.
Un horizonte se abre,
esperanza en la lejanía,
hay una luz que emerge
para alumbrar a la rima.

miércoles, 11 de marzo de 2009

Rocío sobre las plantas

Rocío sobre las plantas
son tus razones, palabras,
y con esa actitud florecen
las adormecidas almas.

Silencio sobre silencio
al saludar la mañana,
donde el misterio es eco
de la realidad temprana.

Reflexión, razonamiento,
como ecuación del alba
que se despeja en el tiempo
de las horas ya pasadas.

Ha pasado ya el tornado
de los llantos, de las lágrimas,
y solo queda el recuerdo
entre sombras sosegadas.

Llega la primavera,
está tocando ventanas,
deja el balcón abierto
que quiere embriagar la estancia
de realidades, de sueños,
con su sencilla fragancia.

viernes, 6 de marzo de 2009

La noche

La noche cubre penurias
de la realidad añorada,
tatuada lleva una luna,
en amanecer, libertaria.
Entre sueños y realidades
se hace una mezcolanza…
la luna sueña con rayos
de una luz irradiada.
Ya se oye el redoble
de las humildes campanas,
un eco de pasodoble
mece a una piel cansada
que se acuna entre susurros
de una historia soñada.
Se oye el eco de los pasos
que una historia marcan,
una voz, brindis de vasos,
no siendo jamás amapolas ,
brindan por la memoria
de agua, espuma de olas.
¡Cuánta tristeza en la luna!
¡Cuánta tristeza en las horas!
Ya junto al sol se acurruca,
duerme junto a lo que añora.
En su mirada ausente
existe un mundo vívido,
no hace encajes con la muerte…
su vida no pende de un hilo
y al ritmo, cántico de sirenas,
se deja mecer entre vaivenes,
cuando se oculta la luna,
cuando el día amanece.

martes, 3 de marzo de 2009

Caballo…

Caballo que desbocado
galopa por donde quiere
ha de tener gran cuidado
en pisotear las mieses.

Otros caballos corrieron
por el prado fresco, verde,
las herraduras perdieron,
caballo, que tú las pierdes.

La Terrera está muy alta,
te mira desde sus cuencas,
con esa vacía mirada,
con los ojos de sus cuevas.

El río dormido anda
sobre su lecho desierto,
el río te tiene cerca
y permanece al acecho
viendo tu correr febril,
correr en desespero.

Caballo no te desboques
vuelve a tu trote en silencio,
caballo que se desbocó
tuvo que ir al herrero,
se quedó sin herraduras
y con el pesebre sin heno.