miércoles, 29 de septiembre de 2010

Al leer...

Al leer tus sentimientos
sin palabras, enmudecida,
así es como me quedo
viendo al mar besar la orilla,
beso laureado de recuerdos.

Escuché en el horizonte
una voz, viento que silba
me dije, pero…no pensé,
el mundo es maravilla
donde todos, por doquier,
se ajustan a la plantilla
de eso que quieren ser…
hacen una pantomima
donde discursos veloces
bailan canción de cantina.
Suspiro de soles sedientos
en atardeceres rojos
de un verano somnoliento
que va dejando rastrojo
en su caminar lento.
Cerca, lejos, espumosas olas,
huellas y sedimentos
van prendiendo amapolas
en desencantados cuerpos.
Una mirada sincera,
un sol, un lucero,
pinares en la ribera,
un pantano en silencio.
Sau se enorgullece
de sus aguas silenciosas,
la torre no quiere
perecer,
es majestuosa.
Las olas vienen y van,
perfume de jazminero,
y comienzan a bailar
la comedia de recuerdos.

viernes, 24 de septiembre de 2010

En la vida todo es ir

Para mis primos Marisol y Manuel. Esta canción me recuerda el reencuentro y parte de nuestras vivencias. Adelante hacia el futuro, ilusión de nuestros sueños, para hacerlo presente

lunes, 20 de septiembre de 2010

José Antonio Labordeta

El “Canto a la libertad”,
ese “Somos” cantado
y otras tantas canciones
de amaneceres soñados,
me hacen sentir tu muerte
como principio de un lapsus
donde la lucha es lucha,
donde hay risas y desamparo…
rincones enmudecidos
por el rescoldo de llanto.

Aragonés de firmeza,
firmeza de voz y canto
en tu garganta el jilguero
con majestuosidad se alza
para entonar ese trino
de denuncia y esperanza.

Y habrá un día en que todos,
si ese día es que se halla,
verás, tú, José Antonio,
derribarse las murallas
en pos de la libertad…
solo queda la palabra.

Poeta, alma de firmeza,
con las convicciones claras,
me gustan tus canciones,
adoraba tus charlas
sentada en los rincones
de mi solitaria alma.

martes, 14 de septiembre de 2010

Por mi mala cabeza

Quiero compartir esta canción de Paco Ibañez, cantautor que tanto admiro

Paco Ibañez - Por mi mala cabeza