Tantas cosas amadas
dejé al paso del tiempo
que ahora desterrada
en abismo de silencio
suspiro por la alborada
en el despertar de sueño.

Detrás de la luna que brilla
creo siempre que anda Venus
y tras la pura hipocresía
se eclipsan hasta los luceros.

Yo soñé con las miradas
desde almas siempre limpias,
no sabía que soñaba
hasta que sangró mi alma.

¿Me miras?¿Me llamas?
Tu música no me encanta
debe ser que ya el ocaso
y el amanecer no es nada
si te ocultas tras las sombras
sombras que me desencantan.

Hoy amanece pues...
amanece en mi mirada
y en ese interrogante
que en mi interior emana
ai preguntarme por qué
he sido tan confiada.

La verdad y la mentira
solo es mezcolanza
que deja siempre herida...
tu la verdad querías
y siempre habló mi alma
desde una perspectiva
pero perspectiva clara
que puede estar en lo cierto,
también equivocada
hablaba con sentimiento
sin afanes ni máscaras.

A mi destierro me vuelvo
noches de chales y galas
que mejor es el silencio
que derroches en palabras